Tarot Mallorca Nanusk: ¿Qué es el Tarot de Marsella?

 A la pregunta formulada de ¿Qué es el Tarot de Marsella?






Voy a explicar en este breve artículo que es el Tarot de Marsella y para qué sirve el mismo.

El Tarot de Marsella es un mazo o baraja de cartas compuesto por los denominados arcanos mayores y los arcanos menores.

Los arcanos mayores están compuestos por veintidós cartas que representan diferentes figuras arquetípicas, y los arcanos menores son cincuenta y seis cartas, que se asemejan a los naipes de juego de cartas de mesa.

¿Pero que es en sí el Tarot de Marsella?




El Tarot de Marsella es un sistema oracular que te permite saber el presente de una persona, o saber el presente de una situación cualquiera sobre la que se desee adquirir conocimiento, o comprensión de que sucede, o que circunstancia está pasando. También se puede usar el sistema del Tarot, para ir hacia atrás en el tiempo, sabiendo así el pasado de una situación, o bien puedes proyectarte hacia adelante en el futuro, para saber el posible futuro de lo que quieras saber.

Para manejar lo que son las cartas o baraja del Tarot de Marsella, es imprescindible haber sido iniciado en su uso, y por tanto, se tienen que conocer las técnicas interiores de uso del Tarot, y se tienen que conocer las técnicas exteriores de uso del Tarot.




Para conocer esas técnicas se tiene que iniciar en el conocimiento del mismo a través de un maestro. Eso es imprescindible. Si no te dan ese conocimiento, que venga de una persona que lo posea, no tienes nada.

Repito con toda claridad, que para conocer y usar provechosamente con éxito, el manejo verdadero del Tarot de Marsella, el operador, tarotista, cartomante, o practicante de brujeria , tiene que conocer las técnicas interiores de uso del Tarot, y asimismo, tiene que conocer el uso de las técnicas exteriores de dicho sistema oracular. De no conocer lo expuesto, no puedes usarlo satisfactoriamente, porque no te serviría absolutamente para nada. 

¿Cómo funciona específicamente el Tarot de Marsella?




La energía que usan en este sistema oracular, es exactamente el mismo tipo de energía que usa una persona que sea rabdomante, cuando el mismo busca un pozo de agua en un terreno y busca dicha agua andando y sujetando una vara de olivo con las manos.

Es completamente cierto, que se acostumbra en muchos pueblos ribereños del Mar Mediterráneo, a usar de los servicios de los rabdomantes para encontrar agua en las fincas rústicas y huertos de las zonas rurales.

Cuando una persona tiene un terreno agrícola, y en el mismo quiere hacer un pozo de agua, pues evidentemente, el agricultor no contrata los servicios de un satélite espacial de la NASA desde los Estados Unidos, para que dicho satélite sobrevuele de forma aérea, por el espacio su terreno, y para que el satélite detecte donde esta el agua, bien sea por localización geotérmica o bien sea mediante el uso de un sonar magnético, y esa persona no lo hace, porque se está fuera de su alcance como agricultor, el hecho de contratar un satélite para estos menesteres.




Qué es lo que hacen entonces desde siempre, los propietarios de los terrenos agrícolas en estos casos. Pues sencillamente, en el pueblo donde viven, se procede a llamar a un rabdomante, también conocidos con el nombre tradicional de zahorí.

El nombre referido, de rabdomante o de zahorí, es el que se refiere a una persona, que tiene una especial habilidad y un especial conocimiento adquirido en su vida, y tiene además un entrenamiento específico. El zahorí, esta adiestrado en buscar y encontrar agua con unos medios específicos y propios de esa profesión.

El rabdomante posee unos conocimientos, con los cuales, coge una rama de olivo y sujetándola con las manos, va pasando andando por unos terrenos que pueden ser pequeños, o bien pueden tener una extensión enorme. Puede tener que localizar agua solo en unos pocos cientos de metros, o bien en terrenos de varias hectáreas de extensión.




El rabdomante o zahorí, con el uso de su vara de olivo, cuando él considera acertado el punto señalado donde marca la vara que hay una vena de agua en el subsuelo, se para y dice aquí hay agua. 

Sabiéndolo porque así se lo indica la herramienta que usa, la vara de olivo.

Entonces, una vez ha detectado donde está el agua del subsuelo, en ese momento viene la pala, o la grúa, o el camión de hacer agujeros y pozos, y se procede a hacer el agujero en el suelo.

Proceden a excavar el terreno, y usualmente ya a cinco metros o bien a diez metros de profundidad, se encuentran con una vena de agua, y a partir de ahí, se empieza a hacer el pozo.




El rabdomante o zahorí, puede fallar alguna vez, y de hecho puede fallar dos veces, o tres veces, pero normalmente suelen acercar a la primera prueba, aunque es cierto que hay que hacer la tentativa de localización de la vena de agua en varias ocasiones, pero no más de tres veces se tiene que hacer la tentativa de localizar el agua para tener un pozo. Los operarios no hacen el agujero para nada. Se cava solamente cuando se ha marcado el agua. En ese momento se procede y no antes.

El zahorí vive de su trabajo. Si el zahorí es falso, y no sirve para nada, entonces desde ese pueblo dejan de llamarlo, y las personas dejan de requerir sus servicios, y dejan de llamarlo también de los pueblos próximos y dejan de llamarlo de la región entera donde trabaje.

Curiosamente poca gente piensa que el zahorí sea una persona con una sensibilidad especial, que tiene desarrollada y entrenada. Pocos piensan que sea un método místico para localizar el agua, y no obstante, si lo es.

Es un método místico para localizar agua.




El zahorí usa una vara de olivo de unos pocos palmos de longitud, como herramienta sensibilizadora de localización de agua, pero algunos zahorís utilizan, no una vara de olivo, sino que llegan a utilizar incluso un reloj de pulsera con manillas con igual eficacia.

Y aparte de agua, se puede localizar cualquier otro objeto.

Hay personas que lo utilizan en algunos países, para localizar petróleo, o bien oro, o bien otros objetos.

En España, el zahorí tradicional, busca exclusivamente agua.




Quiero decir con este ejemplo, que el tarotista, la persona adiestrada en el uso del Tarot de Marsella, usa la misma energía mística, invisible, y espiritual, que es una energía real y verdadera, a la que usa el zahorí.

Es una energía invisible, pero tan real y verdadera, como que existe la electricidad y que existe la fuerza magnética, y que existen a su vez las radiaciones y energías varias.

Es una de las diferentes tipos de energía que se llaman energías místicas, de las cuales existen varios tipos.

Quiero hacer constar que el zahorí no sabe usar las cartas del tarot, pues no está adiestrado para ello. De la misma manera, que el tarotista no sabe usar la vara de olivo para localizar agua. No obstante, repito la energía es la misma, pero usada en formas completamente diferentes.

 Las técnicas y los conocimientos requeridos son completamente diferentes.

Los usos del Tarot de Marsella específicamente.




Bueno, cuando se va a usar el sistema oracular del Tarot de Marsella, sencillamente se coge de forma predeterminada y seleccionado, un tema específico, un hecho, o un objeto, del que ya se conoce el tema, o que bien se sabe de antemano que es lo que ha pasado y se conoce toda la situación. Se realiza entonces el sistema elegido y la aplicación del Tarot de Marsella, con las técnicas precisas requeridas para ello.

 Y entonces, con el resultado de lo que dicen las cartas del tarot, que es el sistema oracular utilizado en este caso, el resultado de la prospección oracular realizada, debe decir exactamente lo que ya se sabe de forma externa por el operador o tarotista, porque lo que se esta realizando, es una tirada de comprobación, o de calibrado y de funcionamiento con éxito del método usado. Una vez se han cargado las herramientas correspondientemente, se procede a calibrar esas herramientas que se van a usar y a hacer un testeo del método que se está usando, que en este caso es el Tarot de Marsella. 




Se comprueba una y otra vez, las veces que sean precisas, bien sea con temas personas o bien sea con situaciones que ya se conocen de antemano, mediante las tiradas de las cartas del Tarot que sean precisas, a efectos de comprobación y testeo de las mismas, y las cartas del Tarot, en ese momento, deben decir exactamente lo que ya se sabe con antelación.

Si el resultado de lo que sale es correcto, las herramientas usadas,  que son las cartas del Tarot de Marsella, junto con la técnica de empleo del mismo,  junto con el conocimiento interno empleado, junto con la energía especifica empleada son correctas, entonces desde ese preciso instante se puede usar el sistema oracular para saber lo que quiera y desee saber, de personas, de situaciones, o de cosas, de los cuales el tarotista no tiene ningún conocimiento previo, localizando y respondiendo a cualquier pregunta que pueda ser formulada. Como el sistema ha sido calibrado y comprobado con cosas que si se sabían con antelación, comprobando el sistema previamente, una y otra vez,  es lógico que cuando se usa en situaciones, en cosas y en personas que no se sabe nada de las mismas, porque se desconoce la respuesta, por qué no se tiene contacto ninguno con lo que preguntan, pues se debe dar fe, de que el resultado del Tarot es verídico, y exacto también en esas situaciones, porque ha sido comprobado el resultado con otras circunstancias que si se conocen.




Una vez que ya se ha realizado lo que es la tirada oracular, la persona que pregunta, esto es, el consultante, y que puede ser un consultante externo, o bien puede ser el mismo operador o tarotista que quiera saber cosas. Pues luego, si se puede investigar o se pueden corroborar parte, o la totalidad de lo que ha sido dicho, pues hay cosas que se pueden referir al momento presente, o bien se pueden referir al momento pasado o bien se pueden referir a una posibilidad del tiempo futuro.

Hay que tener en cuenta que el Tarot de Marsella, sirve para orientar personas y situaciones, pues el futuro es movible. Hay cosas que sí tienen o pueden suceder, pero otras cosas, pueden modularse. Y es en la intención de lo que uno quiera, una vez se posea el conocimiento de lo que ha sido dicho, que se pueden tomar unas decisiones o acciones adecuadas.

Para eso tenemos estas herramientas, y tenemos este conocimiento específico, que ha perdurado en forma verdadera en las manos de algunos iniciados.




Sin el conocimiento adecuado de manejar el Tarot, este no sirve para nada. No habría ninguna diferencia entre un grupo de personas que jugasen a las cartas de la baraja española sentados en la mesa de un bar. De la misma manera, que sería lo mismo que darle a un niño una rama de olivo, y decirle: hala recorre el campo, estas veinte hectáreas de terreno, y dime dónde hay agua. El resultado sería catastrófico si hubiese que hacer un pozo cada vez. 

El conocimiento de las técnicas del Tarot son precisas, y exactas, y que se usan de la misma manera en que un médico en su especialidad, solicita hacer una radiografía a una persona, o un TAC, o una resonancia magnética. El tarot se usa para tener conocimiento de una situación. Ese conocimiento puede ser por curiosidad, o para ver cómo va algo. Algún tema que preocupe a una persona, o quiera saber de ese tema, o también como primer paso para ver qué es lo que sucede, para intentar solucionar un problema o lograr un objetivo.




Para saber si se ha encontrado un tarotista o profesional adecuado en el conocimiento y manejo del Tarot de Marsella, solamente está el sistema de prueba y error, pues hay muchas personas que dicen que saben, y son auténticas personas problemáticas, que no hacen sino liar a las personas sin ningún resultado verdadero.

Respecto al futuro, que es lo que preocupa a muchas personas, hay lo siguiente: La vida es como un libro. El libro está dividido en capítulos. Cada capítulo tiene una letras muy gordas, que son los titulares, y cada capítulo tiene esas letras gordas que te dicen lo que te va a pasar. Luego hay veinte o veinticinco páginas en las que se desarrolla ese capítulo, escritas con letra pequeñita normal de lectura. Lo que sucede es que, normalmente por causa de destino, lo que está escrito en letras grandes si va a suceder siempre, pero lo que está escrito en letras pequeñitas, a veces, puede ser cambiado en una dirección, o en otra. Pero para eso hay que verlas venir. Para  ver venir situaciones, si se puede utilizar el Tarot, o bien la astrología, o bien el conocimiento espiritual y místico, o bien la ayuda de un sensitivo, u otras técnicas. Y a partir de ahí, sabiendo lo que hay, se puede planificar una situación de vida, repito bien, para resolver un problema, o para lograr un objetivo.




El Tarot de Marsella es el medio que se utiliza para saber alguna situación en concreto, de la cual se desconocía todo o parte del contenido de lo que se quería saber. Una vez se tiene la respuesta que se buscaba obtener, hay que tener también por parte del tarotista, del conocimiento espiritual, entre otras cosas en su caso, para proceder a resolver o lograr los cambios adecuados que se puedan estar buscando. 





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